lunes, 19 de septiembre de 2016


Homenaje a los últimos fusilados 
y a todas las victimas del fascismo

domingo 25 de septiembre
cementerio civil de Madrid
12 h




domingo, 24 de julio de 2016




Boletín del Departamento de Relaciones Internacionales del EMEP 
20 del julio (publicado antes de la declaración del estado de emergencia por el Presidente Erdogan)


"El Gobierno extiende de 4 a 30 días este tipo de arrestos en su primer decreto tras declarar el estado de emergencia: se amplía el periodo máximo de detención sin cargos tras el golpe"


Una contra revolución dentro de la contrarrevolución!

Ni el golpe ni la dictadura unipersonal!


En la noche del 15 de julio, Turquía fue testigo de la toma de posesión de algunos puntos críticos en dos importantes ciudades por parte de fuerzas militares. Los mentalizadores se hicieron cargo de la sede del Estado Mayor, del Comando General de Gendarmería, una base aérea y el aeropuerto de Atatürk de Estambul.


Los comandantes del Estado Mayor fueron detenidos. Los aviones cazas volaban a baja altura sobre ciudades y más tarde junto con helicópteros bombardearon ciertos objetivos, incluyendo TBMM (Edificio del Parlamento de Turquía), las inmediaciones de la Jefatura del Estado Mayor y de la Comandancia de las Fuerzas Especiales.

Sin suficiente preparación y fuerza, los golpistas, tal vez forzados a actuar por las circunstancias y posiblemente abandonados por sectores de las Fuerzas Armadas que se comprometieron a apoyar, llegaron a un callejón sin salida en cuestión de horas.


En primer lugar, no pudieron ganarse a la población y su sección organizada. El golpe no fue apoyado por nadie, no tuvieron un  cuerpo organizado como un partido político o un sindicato. Los cuatro partidos políticos en el Parlamento emitieron una declaración conjunta contra el intento de golpe.


Por otro lado, los conspiradores no pudieronatraer a su lado a las principales tropas dentro de las Fuerzas Armadas. Se enfrentaron a la policía y las Fuerzas Especiales donde existen cientos de miles del personal esta controlados directamente por el gobierno.


Militantes islamistas politizados, con yihadistas entre ellos, mostraron su nivel de organización al confrontar a los golpistas de la mano con la policía. Estos grupos respondieron a las llamadas de  “tomar las calles” por parte del  Presidente Erdogan, a quien los conspiradores fallaron  en su captura.


Un creciente número de partidarios del AKP y sectores de la población que insiste en la democracia también llenaron las calles en desafío al golpe.


En un país donde han ocurrido diez golpes de estado, los únicos que pueden tener éxito son aquellos que están respaldados por los EE.UU.; a pesar de que la postura inicial fue ambigua, los conspiradores del 15 de julio no pudieron obtener el apoyo de los EE.UU. Y no tuvieron éxito.

Sin embargo, no cabe duda que la línea de la política interior y exterior seguida por el gobierno del AKP y el Presidente Erdogan -que está creando de facto “el poder de un solo hombre” - arrastró a Turquía a esta circunstancia del golpe.


De hecho, durante el referéndum constitucional de 2010, la pretensión principal de la AKP y Erdogan era que estaban “Ajustando cuentas con la Constitución golpista” de 1980 y que “no habrá más golpes de Estado en Turquía”!


Esto no ha sucedido, el “ajustar cuentas con la constitución golpista” nunca tuvo lugar, por el contrario se han adoptado medidas con el fin de destruir las ya debilitadas  instituciones y  libertades del país.


Poco después de ser elegido como presidente, Erdogan reclamó “de facto un cambio de régimen” y afirmó que el sistema parlamentario era “un freno” y tomó medidas en esta dirección. El legislativo ha sido subordinado al poder ejecutivo. Se agrandóla “voluntad nacional”; centrado únicamente en la “papeleta” en lugar de los derechos y las libertades democráticas y se eliminó la inmunidad de los diputados, avanzando a tal punto  dedeshacerse de los parlamentarios no deseados.


Para demostrar que “voluntad nacional” significa la “decisión de un solo hombre”, la voluntad del pueblola rechazó en las elecciones celebradas el 7 de junio el año 2015, en las que le dijo “No” a la “dictadura unipersonal”


A través de la instigación de la guerra contra los kurdos -alimentando el nacionalismo chovinista- el país fue arrastrado a la guerra y el caos y obligado a las elecciones el 1 de noviembre.


La libertad de prensa se ha eliminado casi por completo. La libertad de expresión, particularmente la libertad de pensamiento, el derecho de reunión y a organizar manifestaciones se han hecho imposible. Manifestaciones como las del  primero de mayo y hasta el derecho de los militantes del principal partido de la oposición a celebrar reuniones, se han negado.


Los académicos que firmaron una petición de paz, llamando al gobierno a poner fin a sus operaciones militares en la región kurda, han sido despedidos y encarcelados.


Además, se anunció recientemente que las administrativos municipales y locales del Partido Demócratico de los Pueblos elegidos por la gente serían dados de alta y se sustituirían por administrativos arbitrariamente asignados por el gobierno.


El poder ejecutivo se vio reforzada por la “Ley de Seguridad Interna”, que dio poderes excepcionales a la policía y a los gobernadores provinciales.


En la guerra llevada a cabo en las ciudades kurdas, las fuerzas armadas están protegidas por la concesión de la inmunidad; los soldados no pueden ser juzgados sin el consentimiento del Primer Ministro.

Estas acciones se va llevando a cabo a nivel nacional, en nombre de  la “lucha contra el terror” en lugar del “proceso de paz” y por la renovada alianza con los soldados de “Ergenekon”, que habían sido detenidos por planear el golpe contra el gobierno.


La política de guerra, los asedios en las ciudades con tanques y cañones, asesinatos de miles de personas, la eliminación de los derechos democráticos y las libertades, han conducido al país a una situación en la que no se puede gobernar en circunstancias ordinarias.


Además, el uso creciente de las armas permitió que soldados aumentaran su influencia en el gobierno. Esto hizo que el país fuera más débil ante intentos de golpe.


El poder judicial se ha subordinado al poder ejecutivo, elConsejo Superior de Jueces y Fiscales, compuesto en su mayoría por miembros designados, han sido identificados como supuestos golpistas y reemplazados por ‘tribunales especiales’.


Una tercera parte de los jueces y fiscales han sido reubicados. Antes del intento de golpe se declaró que a excepción de los Presidentes de la Corte de Casación y el Consejo de Estado, todos los miembros de ambas instituciones serían designados por el poder ejecutivo.


El fallido golpe fue seguido por despidos y detenciones de 2745 jueces y fiscales, entre ellos dos miembros del Tribunal Supremo, 140 miembros de la Corte Constitucional y 48 miembros del Consejo de Estado.

En el  mismo sentido han avanzado en la política exterior, persiguiendo una política de guerra dentro de los propósitos del expansionismo Nueva-otomana.


La impracticabilidad y la falta de armonía de la política exterior después de la intervención rusa en Siria causaron descontento y la búsqueda de alternativas entre las fuerzas dominantes. Las líneas rojas de gobierno del AKP sobre Siria en relación con cuestión kurda y con el futuro del régimen de Bashar Assad, perdieron todo significado y lo obligaron al gobierno a un cambio de política.


Se adoptó una línea política de normalización de las relaciones con Israel y Rusia. Sin embargo, el colapso de los objetivos de política exterior -enfocado en la política de guerra- condujo a un conflicto entre las camarillas gobernantes y provocó actividades militares.


Por otra parte, las medidas adoptadas para unir a las clases dominantes en el nombre de transición a una dictadura de un solo hombre y un solo partido llevaron al descontento y desazón entre las fuerzas reaccionarias.


Las sanciones tributarias, la exclusión de licitaciones gubernamentales y la puesta en común de los recursos del gobierno, todos introducidos en un intento “convencer” incluso a los grupos tradicionales de capital monopolista, son algunos de estos pasos.


Las sanciones más graves fueron dirigidas contra el movimiento deGülen, un ex-aliado del AKP desde su fundación, pero rompieron después de las investigaciones de corrupción 17 al 25 de diciembre dirigidas al gobierno.


Este movimiento de Gülen no sólo es islamista, sino también un fondo monetario grande.


Con sus empresas bancarias y de inversiones, la compañía minera más grande del país, su inversión generalizada en los sectores de medios de comunicación y educación y a través de su alianza con AKP, este grupo penetró la mayor parte del aparato estatal; principalmente dentro de la policía, el poder judicial y las Fuerzas Armadas.


Después del 25 de diciembre, este grupo fue declarado una “organización terrorista”, su entidad bancaria y la minería fueron capturadas, los medios de comunicación e instituciones educativas se cerraron; las empresas y los militantes fueron perseguidos y encarcelados.


Después de la limpieza en el poder judicial y la policía, a medida que los nombramientos y ascensos en las Fuerzas Armadas, al final del mes de agosto  las investigaciones, detenciones y procesos judiciales contra miembros de este grupo ya habían comenzado.


Esta fue la "última gota"; las fuerzas organizadas de este grupo y otros grupos descontentos en el ejército intentaron un golpe; consciente de las listas de limpieza, en lugar de ser dados de alta y encarcelados, que eran, en cierto modo, la presión en esta tentativa.


Este golpe ha surgido como un enfrentamiento dentro de la clase dominante. Es innegable que el golpe -con sus primeras medidas indicadas en la ley marcial e inhibición- iba a avanzar en el aumento de la reacción, tanto en política interior y exterior y por lo tanto repelerlo era importante.


Sin embargo, está claro que con  el intento de golpe se ha fortalecido la mano del reaccionismo de un solo hombre, reaccionismo de un solo partido del AKP. El Presidente Erdogan llamó a este intento “un regalo de Dios” y afirmó que le da una “oportunidad para limpiar el ejército”. Este intento expreso la composición ideológica islamista la policía y la existencia de una organización militante leal a Erdoğan que ha jugado un papel importante en la supresión del golpe después que Erdoğan los llamó a salir a las calles. Además, reforzó esta base organizada del AKP dentro de la población.


Ahora, bajo el pretexto de “limpieza apresurada de los conspiradores”, ha iniciado una extrema limpieza entre los jueces y fiscales, junto con la policía y el ejército.

Está claro que esto va a servir para los fines de crear un mecanismo estatal que sigua sólo las órdenes de ‘un solo hombre’.


El gobierno del AKP ya ha comenzado a legitimar esta purga con el pretexto de la lucha contra el ‘terrorismo Gülenista’ y a tomar medidas enérgicas contra los conspiradores del golpe. Aprovecharon del golpe fallido como catalizador para unir a la población -a partir de la oposición burguesa- en torno a sus propios objetivos.


Nuestro partido, EMEP, se opuso claramente el golpe. Pero también nuestro partido advierte a todos que la derrota del golpe por sí solo, no significa necesariamente que la “democracia” es el ganadora, porque para ganar la democracia con sus derechos y libertades requiere una lucha dura, y convocamos a todo el pueblo a la lucha para impedir la dictadura unipersonal, la dictadura de un solo partido.

Emek Partisi

Partido del Trabajo
Turquía


20 del Julio

martes, 19 de julio de 2016


Ante los acontecimientos que ocurren en Turquía: 
Comunicado del Partido del Trabajo de Turquía




LA ALTERNATIVA DEL PUEBLO 
NO PUEDE SER NI GOLPE MILITAR 
NI LA DICTADURA UNIPERSONAL 
DE UN SOLO PARTIDO

La alternativa es defender los Derechos democráticos y las Libertades políticas.
La alternativa es luchar por la Democracia Popular


En el curso de la vida política de Turquía se han producido muchos golpes e intentos de golpes de Estado. Los resultados de cada periodo golpista has sido incontables asesinatos, torturas, persecuciones, restricción de los derechos y las libertades.

Las demandas y anhelos de libertad, igualdad y democracia levantadas por los Pueblo oprimidos y las masas populares, se vieron sofocadas por los golpes militares y las políticas que las siguieron.



Las medidas para contrarrestar las políticas orientadas al establecimiento de la dictadura unipersonal del Gobierno del AKP y del presidente Tayyip Erdoğan no son ni pueden ser los golpes militares. Por el contrario, esos intentos golpistas sirven de excusa para una más rápida y violenta aplicación de esa política.


Erdoğan y su gobierno, que han pedido a sus votantes salir a las calles a rechazar el golpe, buscan aprovechar la situación para recuperar su prestigio perdido en el interior y el exterior del país debido a su política oportunista e inconsistente que busca alcanzar sus objetivos reaccionarios y fascistas. Las escenas de personas armadas con hachas, espadas y todo tipo de armas blancas y de provocaciones recuerdan los métodos del estado islámico, son señales de lo dicho.


Está claro que el pueblo de Turquía, compuesto por diferentes naciones y creencias, no está obligado a elegir entre el golpe de estado y la dictadura unipersonal de un partido.


La alternativa popular es el establecimiento de una Turquía verdaderamente laica y democrática. La vía para salir del asedio antidemocrático es la defensa de los derechos democráticos y las libertades políticas. La alternativa es luchar por la democracia popular.

Selma GÜRKAN

Presidenta del Partido del Trabajo (Turquía)
EmeK Partisi (EMEP)




Miembro de la Conferencia Internacional de Partidos y Organizaciones Marxistas Leninistas (CIPOML)



martes, 5 de julio de 2016

10 de julio: Contra el Imperialismo

Lenin: Imperialismo fase superior del capitalismo

Un apunte para el debate marxista de hoy ¿qué formas toma el imperialismo en el siglo XXI?

y mientras tanto...

Por un Pueblo libre y soberano de sus actos

en Madrid:


 y en Sevilla:

miércoles, 15 de junio de 2016